La Organización Mundial de la Salud (OMS) instó e a todos los países a invertir más en salud mental, afirmando que “el sufrimiento es enorme” y que se ha acrecentado con la pandemia del covid. La organización indicó en un informe que Incluso antes del covid-19, casi 1.000 millones de personas vivían con un trastorno mental.
En 2019, casi mil millones de personas –entre ellas un 14% de los adolescentes de todo el mundo– estaban afectadas por un trastorno mental. Los suicidios representaban más de una de cada 100 muertes. El 58% de ellos ocurrían antes de los 50 años de edad. Los trastornos mentales son la principal causa de discapacidad y son responsables de uno de cada seis años vividos con discapacidad.
“Los vínculos indisolubles entre la salud mental y la salud pública, los derechos humanos y el desarrollo socioeconómico significan que transformar las políticas y prácticas con respecto a la salud mental puede arrojar beneficios reales y considerables para las personas, las comunidades y los países de todo el mundo. La inversión en salud mental es una inversión en una vida y un futuro mejores para todos”, señaló el director de la OMS, Dr. Tedros Adhanom Ghebreyesus.
Cabe mencionar que sólo un 2% de los presupuestos nacionales de salud y menos un 1% de toda la ayuda internacional está dedicada a la salud mental, destacó el informe de la OMS. “Todas estas cifras son muy, muy bajas”, declaró Mark Van Ommeren de la división de salud mental de la OMS en una conferencia de prensa.
Brechas entre países
El informe de la organización, puse en evidencia los obstáculos a los que se encuentran en la salud mental los países de bajos ingresos. Si bien en los países de ingresos altos el 70% de las personas con psicosis reciben tratamiento, en los países de ingresos bajos solo el 12% de las personas con psicosis reciben atención de salud mental. Incluso en los de ingresos altos, solo un tercio de las personas con depresión recibe cuidados de salud mental formales. Además, se estima que el tratamiento contra la depresión mínimamente adecuado oscila desde el 23% en los países de ingresos altos hasta el 3% en los países de ingresos bajos y medianos bajos.