Este 10 de octubre, Martha Liria Sepúlveda se convertirá en la primera persona de Colombia en poder optar a una muerte digna, al padecer “un intenso sufrimiento físico” debido a una esclerosis lateral amiotrófica (ELA).
¿QUE ES EL ELA ?
La esclerosis lateral amiotrófica (ELA), a menudo conocida como la “enfermedad de Lou Gehrig”, es una enfermedad neurodegenerativa progresiva que afecta a las células nerviosas del cerebro y de la médula espinal. Las neuronas motoras van del cerebro a la médula espinal y de la médula espinal a los músculos de todo el cuerpo. Con el tiempo, la degeneración progresiva de las neuronas motoras producida por la ELA ocasiona la muerte de éstas. Cuando mueren las neuronas motoras, el cerebro pierde la capacidad de iniciar y controlar el movimiento de los músculos. Debido al efecto progresivo sobre la acción de los músculos voluntarios, los pacientes en las etapas finales de la enfermedad pueden quedar totalmente paralizados.
🟦 La mujer, “feliz” con su decisión, logró que la justicia nacional le autorizara el procedimiento , que desde julio se ha convertido en una excepción dentro de la norma sobre la eutanasia.
🔸A sus 51 años, la colombiana Martha Liria Sepúlveda asegura “estar feliz” de poder morir este domingo 10 de octubre a las 7:00 de la mañana.
🔸El deseo de parar su vida y morir con dignidad se debe a los sufrimientos físicos de los que es víctima desde que le diagnosticaron esclerosis lateral amiotrófica (ELA), una enfermedad incurable que afecta las neuronas y que provoca un grave debilitamiento muscular.
🔸Sepúlveda, que se considera una ferviente católica, afirma que es Dios quien “no me quiere ver sufrir”. Una declaración que, en un país de profunda creencia, retumbó en los oídos de las organizaciones religiosas y de la Conferencia Episcopal de Colombia, que la instó a desistir de su decisión afirmando que “la única solución no es acabar con la vida”.
💬”La muerte no puede ser la respuesta terapéutica al dolor y al sufrimiento en ningún caso. La muerte propiciada mediante el suicidio asistido o la eutanasia no resulta compatible con nuestra interpretación de la dignidad de la vida humana, como sí lo es la utilización de los cuidados paliativos”, le dijo Francisco Antonio Ceballos, presidente de la Comisión Episcopal de Promoción y Defensa de la Vida.